Tras una reunión de casi 12 horas con líderes regionales del país, la canciller de Alemania, Angela Merkel, informó de un nuevo régimen de medidas ante la ola de nuevos casos de coronavirus en el país.
Alemania cerrará, casi por completo, en Semana Santa, sólo negocios de comida abrirán el día 3 de abril, y quedan suspendidas todas las actividades. Las reuniones al aire libre están suspendidas y sólo se podrán hacer reuniones en una vivienda con un máximo de cinco personas.
“El número de casos está aumentando exponencialmente y las camas de cuidados intensivos se están llenando de nuevo”, comentó Merkel.
Fue en noviembre del 2020 que Alemania comenzó un nuevo confinamiento, el cual se ha ido prolongando con el paso de las semanas, debido a que la situación de salud parece no mejorar. Bares, restaurantes, gimnasios y museos han permanecido cerrados desde ese mes y continuarán cerrados hasta el 18 de abril, informó la canciller.
“Alemania sufre una nueva pandemia que es claramente más letal, claramente más infecciosa y contagiosa durante más tiempo”, informó la canciller alemana.
El país también obligará a todos todos los viajeros a presentar un test PCR negativo cuando lleguen de cualquier país del mundo, aunque el lugar no sea considerado de riesgo.
Hasta el momento, la campaña de vacunación ha ido avanzando con lentitud en el país, pues sólo se han vacunado a un 9.2 % de la población con un 60% de los adultos mayores con la primera dosis de ésta.