A través de un análisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) junto a la Secretaría del Trabajo, se ha revelado que aunque el 51% de las funcionarias en 16 secretarías de Estado son mujeres, esta paridad no se refleja en los niveles jerárquicos más altos.
Mientras la mitad de las secretarías están lideradas por mujeres, la proporción disminuye al 33% en los niveles de mando superior, mostrando una brecha significativa.
El estudio resalta que la representación femenina disminuye a medida que aumenta el nivel jerárquico, salvo en las titularidades de secretarías.
Se evidencia que los hombres ocupan el 67% de los puestos de mando, desde analistas hasta subsecretarías, en comparación con el 57% de mujeres que ocupan estos roles.
Esta disparidad en la representación de género se refleja en los salarios, con una brecha del 3% en los puestos de mando superior. Las secretarías difieren en esta brecha, desde un -14% (en favor de las mujeres) hasta un 21% (a favor de los hombres).